QUIÑON DE VALMIRA
Un vino de Álvaro Palacios elaborado en su Rioja natal que puede que este año llegue a los 100 puntos Parker como apunta la crítica de Luis Gutiérrez que lo cató directamente de la barrica. Juvenil, con mucho equilibrio, concentración y finura. Puede que estemos ante el mejor Quiñón de Valmira de la historia.
Bodega: Bodegas Palacios Remondo.
Zona: Rioja.
Variedad: 85% Garnacha, 15% Otras. Crianza de 12 meses en fudres.
Los racimos con los que se elabora el vino Quiñón de Valmira provienen de un único viñedo, un podio calcáreo sobre el Valle del Ebro con suelos fríos que dan como resultado un vino abierto y expresivo. Esta parcela cuenta con un material compuesto por tan solo 20 cm de espesor en superficie donde predominan los sedimentos carbonatados y arcillo-ferrosos, pero es en el subsuelo donde se encuentra un horizonte profundo y cálcico.
El viñedo está situado en una ladera de suave pendiente con cepas con una edad de alrededor de 30 años y donde se trabaja bajo los principios de la agricultura ecológica. Los racimos, al llegar a la bodega, se despalillan y estrujan con suavidad y comienzan la fermentación alcohólica en tinas de madera bajo sus levaduras autóctonas. El vino resultante lleva a cabo la fermentación maloláctica espontánea en barricas y pasa por una crianza de alrededor de 18 meses, dependiendo de la añada, en fudres y bocois.
Quiñón de Valmira es una agradable sorpresa riojana donde la garnacha se posiciona en la cima de la elegancia y la distinción sobre la popular tempranillo. Un tinto de Rioja que de nuevo reafirma el talento del reconocido enólogo Álvaro Palacios para identificar parajes y variedades que conforman matrimonios exquisitos y sorprendentes, un don que lo ha encumbrado como uno de los grandes elaboradores de vinos a nivel mundial.